Una vista perfecta

         Una vista perfecta

Era un día esplendido, yo... ups perdonar no sé si os acordáis de mí... soy Manolo, el lobo Manolo,

 como iba diciendo yo estaba en el monte con mi amiga la loba. Los dos decidimos ir a dar un paseo.

Mientras amainábamos observábamos las esplendidas vistas.

Caminamos como 4 horas, y ya estábamos muy agotados, nos tumbamos y nos quedamos dormidos yo soñaba que estaba en una alfombra pero no una alfombra cualquiera, esa volaba.

Mire abajo y vi un rebaño de ovejas, ¡tenían una pinta...!, pero no me fije en eso sino que me fije en

 las maravillosas vistas: había una catarata inmensa, precipicios, muchos árboles y una hierba verde

como los colores del arcoíris que había encima.

Después de contemplar las vistas decidí tirarme a por las ovejas y .......... ¡me desperté!


Cuando miré a mi amiga ella me contó que había soñado que estaba en un sitio de cataratas y 

que estaba volando en una alfombra que volaba, ¡igual que yo, ella había soñado lo mismo

No hay comentarios:

Publicar un comentario